Desde el PRD, hemos luchado por el fortalecimiento de la cultura de la legalidad y el Estado de derecho, convencidos de que esto, es el pilar central de la certeza y desarrollo social. Creemos firmemente en la vía institucional para la resolución de conflictos y la participación ciudadana.
La centralización del poder, por encima de la legalidad, es sinónomo de exclusión de la sociedad civil organizada que abanderan causas sociales y reinvindican derechos humanos fundamentales en el desarrollo del pueblo.
El centralismo, es la negación del federalismo y el daño mayor, se realiza hacia los municipios, quienes por recortes presupuestales, han lastimado la capacidad de respuestas a muchas de las necesidades sociales por parte de los Ayuntamientos. De la misma manera, los gobiernos federal y estatal, han buscado asfixiar presupuestalmente a organismos autónomos, que fueron diseñados muchos de ellos, para vigilar al poder gubernamental.
Desde el PRD, impulsamos la generación de condiciones que permitan mayor participación ciudadana y que ello, redunde en el desarrollo social que nos permita combatir la marginación, hambre y pobreza en la que lamentablemente se encuentran sumidas muchas comunidades de nuestro México y Veracruz.
El primer paso para empoderar al pueblo, es escuchando y atendiendo sus necesidades comunitarias, quitando el caracter clientelar de los programas sociales y así, devolverles la dignidad como seres humanos con Derechos.
En el PRD, luchamos al lado de nuestra gente, para que tengan acceso a la salud, educación, alimentación y oportunidades de desarrollo social.
Estamos trabajamos por un nuevo amanecer para que nuestras niñas, niños, jóvenes, mujeres y hombres, disfruten de vida con justicia social.
¡Democracia ya, patria para todas y todos!
