• Exigen castigo para los asesinos de dos campesinos
Perote, Ver., junio 23 del 2024(Agencias).- Habitantes de Totalco, Perote, detuvieron unas horas al alcalde y al subsecretario de Gobernación de Veracruz, y bloquearon la entrada al pueblo en demanda de que se capture a los culpables de la represión armada, de la cual también culpan a la empresa Granjas Carroll.
Pobladores de esta localidad retuvieron por más de ocho horas al subsecretario de Gobernación del Estado, Sergio Ulises Montes Guzmán, y al alcalde de Perote, Delfino Ortega Martínez, en demanda de que se castigue a los responsables materiales e intelectuales del asesinato de dos campesinos, así como del operativo de represión realizado este jueves por elementos de la corporación estatal Fuerza Civil de Veracruz.
Los uniformados arremetieron contra defensores del agua de la Cuenca Libres-Oriental que realizaban un bloqueo en Granjas Carroll y aterrorizaron esta localidad haciendo disparos contra población civil. Después de esto, los habitantes bloquearon por 24 horas los accesos carreteros y vecinales a Totalco, incluida la carretera que comunica a Acatzingo y Perote.
El subsecretario de Gobernación y el alcalde llegaron aquí el viernes alrededor de las cuatro de la tarde para buscar un acuerdo para la liberación de la carretera, pero se encontraron con enardecidos habitantes que les hicieron múltiples reclamos y que les advirtieron que, “ahora con mayor razón”, quieren que Granjas Carroll se vaya de esa localidad.
“¡Que se largue Granjas Carroll, ahora menos los queremos aquí, ellos también son responsables de la muerte de nuestros compañeros!”, les gritaron los lugareños, quienes exigieron a periodistas no grabar video ni tomar fotografías o identificar por nombre a los participantes.
“Si pensaron que con esta represión se iba a acabar el movimiento, se equivocaron, ahora vamos a seguir en la lucha para honrar a nuestros muertos”, afirmaron.
Los pobladores primero advirtieron a los funcionarios que no los dejarían ir hasta que resolvieran sus demandas, pero pasada la medianoche los liberaron con la condición de que regresaran este sábado para firmar una minuta en la que exponen sus principales reclamos.
Durante el encuentro realizado a orillas de las vías del tren, los habitantes exigieron la detención de tres policías de la Fuerza Civil de Veracruz que señalan como responsables de haber “ejecutado de manera extrajudicial” a los hermanos Alberto y Jorge Cortina, quienes participaron el jueves en el plantón que reclamaba el derecho al agua para los ejidos.
En momentos exigían que entregaran a la población a los tres uniformados, pero Montes Guzmán les hacía ver que eso no era viable y que tampoco podía ofrecerles el retiro de Carroll, pues tiene concesiones federales para operar. Sin embargo, exigieron al alcalde que le quite a la empresa los permisos de uso de suelo.
También pidieron que se detenga y se castigue a quien ordenó el operativo de represión contra de los agricultores que estaban desarmados, pues los policías estatales persiguieron a algunos de los activistas hasta sus casas y dispararon por las calles de Totalco, donde quedaron regados casquillos de alto calibre.
“Éste fue un operativo planeado, esto lo ordenaron. Ellos venían a matar y sabían contra quiénes iban, sabían quiénes eran los líderes del movimiento, por eso iban contra ellos”, aseguraron. Además, señalaron que tendría que aclararse por qué la Guardia Nacional, que estaba presente, permitió este ataque contra civiles por parte de la policía estatal.
Algunas mujeres encararon al edil y al subsecretario y les reclamaron que sus familias vivieron momentos de terror, en particular los niños. “Nuestros niños se metían debajo de las camas, estaban llorando, gritando y ahora tienen miedo”, les dijeron.
“¿Ahora vienen dialogar? Cuando ayer nada más nos mandaron a la policía a echar bala. ¡Que digan quién los mandó!”, les echaron en cara los lugareños, que se declararon en asamblea permanente.
También refirieron que los dos pobladores asesinados por la Fuerza Civil eran hombres de trabajo que no tenían problemas con nadie y que dejaron cada uno a tres hijos menores huérfanos.
Aunque Montes Guzmán les ofreció que les pagarán una indemnización a las viudas, los habitantes advirtieron que eso es obligación del gobierno, pero no resolverá este conflicto social.
Entre las exigencias de los vecinos está que se les paguen los daños causados por la policía en casas a las que ingresaron, así como en vehículos que balearon, aparte de que se frenen posibles órdenes de aprehensión que haya contra los participantes de esta lucha.
Hasta las 10 de la noche del viernes, la única demanda que habían podido atender fue la liberación y traslado de un agricultor de la tercera edad de nombre Justo Soto, originario de Xalapasco, municipio de Tepeyahualco, Puebla.
Este hombre narró, desde la cama de un hospital de Perote, a un medio local que fue golpeado en la cabeza y diversas partes del cuerpo por los policías, quienes además destruyeron su camioneta. “(Pero) no me arrepiento, te juro que no me arrepiento, es para el futuro de los nietos”, declaró el hombre de más de 70 años, sobre su participación en la defensa del agua.
Luego, en redes sociales, se publicó un video donde se ve que este señor es subido a una patrulla de la policía estatal, todavía con la bata de hospital puesta.
Montes Guzmán dijo a los pobladores que Justo Soto estaba en un hospital de Xalapa y ya le habían autorizado que sería trasladado a Totalco para que volviera a su casa.
Alrededor de las 21:30 horas, Soto llegó al plantón y luego lo trasladaron a su domicilio en el municipio poblano de Tepeyahualco.
Mientras, granaderos se mantienen a distancia y resguardan la entrada a la planta de alimentos de Granjas Carroll, ubicada a unos dos kilómetros del pueblo de Totalco.
Los hermanos asesinados
Jorge y Alberto Cortina Vázquez, hermanos de 37 y 29 años, fueron velados por sus familiares en su casa, con danzas de sus compañeros Gracejos, grupo de danzantes tradicionales del que formaban parte. A los dos los vistieron con el hábito de San Judas Tadeo.
Los familiares contaron que el 20 de junio los dos campesinos llevaron su tractor para bloquear el paso de vehículos en la protesta contra Granjas Carroll y cuando la policía empezó el violento desalojo, ellos se subieron al vehículo y avanzaron hacia los sembradíos para tratar de poner a salvo su patrimonio. Entonces fue que los policías los persiguieron y acribillaron.
Sus cuerpos presentaban varios disparos en la parte abdominal.
Uno de los parientes reveló que cuando quisieron recuperar los cuerpos, los policías les dispararon. “Los escondimos (los cadáveres) si no, se los llevan. Yo creo que querían borrar evidencias”, narró.
María de los Ángeles Cortina, tía de los hermanos, dijo que su familia exige justicia, que se castigue a los responsables de este doble asesinato a manos de la policía y se suman a la exigencia de los habitantes de la región: que Granjas Carroll se vaya.